Un aspecto fundamental para emprender y gestionar un negocio es tener una relación fluida y honesta con los números. Los números nos cuentan historias, nos regañan, nos aplauden, nos llaman la atención, nos muestran caminos, nos ponen los pies en la tierra y mucho más. De ahí la importancia de estar cerca a ellos, sea cual sea nuestra historia con ellos o nuestra profesión, necesitamos los números para gestionar nuestra empresa. Un negocio sin números es como un avión sin radar.
Empecemos por lo básico; todo negocio tiene ingresos y egresos, es decir cuánto vendo y cuánto me gasto, ¿llevas registros de esos dos conceptos? ¿revisas periódicamente esos números? ¿tomas decisiones con los resultados? Luego sigue otro concepto clave, el punto de equilibrio, esto es, cuánto tengo que vender para cubrir mis costos, ¿conoces el de tu negocio? También hay números propios de la gestión empresarial, por ejemplo: número de clientes, ventas promedio por cliente, clientes nuevos, etc.
En el momento de emprender lo usual es que hagamos un plan de negocios, el cual se refleja con unos números que nos determinan su viabilidad. Mi principal consejo es que no se hagan “pajaritos en el aire”. Es usual que nos enamoremos de la idea y tratemos de justificarla a como dé lugar, y el Excel puede con todo, pero luego sigue el choque con el mercado que es el juez final. Así que debemos ser totalmente honestos con esos números.
Todo buen emprendedor y empresario aprende a conocer sus números, tanto los financieros como los indicadores clave de desempeño. Además de conocerlos es tomar permanentemente decisiones con las realidades que nos reflejan. ¡Así que a amar tus números!
Fabio Andrés Montoya Isaza.