Sibia Asias es una mujer de 60 años, alegre, familiar y con un espíritu emprendedor digno de admirar. Es la menor de 7 hermanos y desde que estaban pequeños su padre les enseñó a hacer las tradicionales galletas de limón.
Varios de sus hermanos intentaron montar un negocio de producción de galletas y otros dulces autóctonos de la costa, pero ninguno logró mantenerlo a flote. Hace 10 años, con un caldero y 10 libras de harina, Sibia Asias decidió aprovechar su pasión, su habilidad para la cocina y las enseñanzas de su padre para montar su propia empresa: “Galletas Doña Sibia”.
Los resultados ni ella misma lo imaginó; aunque toda su vida se ha dedicado a cocinar platos típicos de la región y esto le permitió conseguir el sustento para su familia, sus galletas son muy reconocidas y apetecidas. “Creo que el éxito de mis galletas se lo debo al amor que pongo en todo lo que hago, eso es lo que la gente resalta en mí”, expresa doña Sibia con una expresión de satisfacción.
Hace aproximadamente tres años doña Sibia se acercó a Interactuar para solicitar un crédito que le permitiera incrementar su capacidad y se esta manera comenzó a crecer con su empresa. Actualmente tiene cinco calderos y un horno, trabaja con una de sus hijas, su yerno y otros tres jóvenes del municipio, a quienes con paciencia y amor les enseña sus recetas y los impulsa a continuar con la tradición de su familia.
Aunque reconoce lo que ha logrado hasta el momento, no se conforma y quiere seguir creciendo y expandiendo su empresa. Su objetivo es conseguir otro horno que le permita aumentar la producción porque manifiesta que ya se está corta para responder a tanta demanda. También quiere mejorar las instalaciones donde fabrica sus galletas para mejorar las condiciones de trabajo actuales ya que el espacio dispuesto para asar las galletas es el solar de su casa.