- La asociación es uno de los grandes retos asumidos como sector agro.
- Empezaron 47 socios y hoy son 230 asociados quienes reciben capacitación, ayuda logística, infraestructura de beneficios, insumos, herramientas y el acompañamiento de un equipo de trabajo comprometido.
- ACEFUVER es líder en base social trabajando con comunidades indígenas y afro, madres cabeza de familia, personas con discapacidad y víctimas de la violencia.
Chigorodó es un municipio del Urabá antioqueño, una región que ha sufrido el impacto del conflicto armado, donde los campesinos vivían en un estado económico crítico y muchos productores habían perdido la esperanza en el campo. El sueño de impulsar la región y de dar el valor que los campesinos merecen, impulsó a un grupo de productores de Cacao a iniciar ACEFUVER, Asociación de Cacaocultores Emprendedores Futuro Verde.
A través de capacitaciones técnicas y administrativas han logrado que 238 productores incrementen sus capacidades, lleguen a nuevos mercados, comercialicen un producto ambientalmente responsable, con calidad en el sabor y a un precio que dignifica el trabajo en el campo.
“Ganarnos la confianza del sector, de nuestros productores ha sido nuestro mayor reto” expresa Victor García Madariaga, el presidente y cofundador de la asociación. Gracias a tener líderes con un perfil idóneo y que sean capaces de entender las necesidades de sus comunidades es la respuesta para lograr que los campesinos crean en las oportunidades que brinda trabajar como gremio. “Ayudar con pasión, con algo que sea real, no ir por un beneficio propio” añade Victor.
Gracias a la asociación, los productores han recibido servicios de capacitación y asesorías, e insumos, herramientas y acompañamiento logístico. Los resultados demuestran el impacto de la labor, pasaron de 80 hectáreas de cacao a 750, de producir 28 toneladas a 350 toneladas proyectadas para comercialización este año y, aumentaron en 40% el precio del grano. Mejoraron la calidad de vida de los 238 socios y sus familias, accedieron a nuevos mercados, nacionales e internacionales, y muchos de ellos se certificaron en mercado justo y sello verde, lo que les permitirá comenzar a invertir en temas sociales, becas y mejoramiento de vías.
El acompañamiento de Interactuar les permitió transformar su mentalidad, hoy los asociados se ven a sí mismos como líderes empoderados de su labor, de su región y de sus comunidades. En el proyecto Conexión Cacao se reconocieron como verdaderos agroempresarios, con conocimientos administrativos que les ayudaron a ver el verdadero valor del campo.
“Yo veo a mi empresa y la empresa de mis socios con un potencial enorme” expresa Victor, quien asegura que la asociación se convertirá en una empresa líder, en calidad, en producción y en base social, donde todas las personas tienen el mismo valor, y donde ofrecen un producto orgánico y responsable.